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¿Cómo darle valor agregado a tus productos y servicios?
22 septiembre, 2017

En un mundo competitivo los detalles son muy importantes. ¿Has notado que hay ciertos productos que resaltan entre sus competidores y servicios que se convierten de inmediato en los preferidos por el público? Esto se debe al valor agregado que ofrecen. En este artículo te contamos qué es y cómo incorporarlo a tu negocio.

¿Qué es el valor agregado?

El valor agregado supone cualquier característica adicional de tu producto que genera un beneficio extra a su función principal. Esta razgo genera la percepción de mayor valor en el consumidor y muchas veces puede influir en la decisión de elegir un producto o servicio sobre otro.

Algunos ejemplos de valor agregado

  • El valor agregado de una barra de chocolate puede ser su origen y proceso de elaboración orgánico.
  • En el negocio informático el valor agregado puede ser el servicio técnico y garantía que ofrece la compañía a todos quienes compran sus productos.
  • Inclusive en los negocios pequeños, la atención que brindes a tus clientes o el trato personalizado serán ser factores que tu cliente recordará y preferirá.

¿Cómo se genera el valor agregado?

El valor agregado puede influir en el desarrollo y el futuro de tu empresa. Esta característica puede ser la que diferencia tu producto del mercado y lo visibilice a tus clientes. Para que sepas cómo darle un valor agregado a tus productos, te recomendamos estos pasos:

  1. Crea una hoja en la que se describa el proceso comercial de la empresa. Esboza con gráficos cada paso de lo que sucede con tu producto o servicio desde que es creado, hasta que es puesto en el mercado.
  2. Describe los detalles de cada etapa de este proceso. Una característica al momento de producción o la calidad del contacto entre vendedores y clientes pueden ser tu clave para empezar a agregar valor.
  3. Ponte en el lugar de tu cliente. Por un momento olvida que eres parte del negocio y preocúpate por los intereses de tus clientes, sus preocupaciones y posibilidades. Piensa en qué momento necesitan acompañamiento, asesoría o capacitación para usar tus productos.
  4. Si te es difícil ponerte en los zapatos de tus clientes, organiza un “focus group” o desarrolla encuestas para que sepas de primera mano lo que le interesa y preocupa a tu público objetivo.
  5. Con toda esta información, escoge 3 aspectos que hacen que tu producto sea diferente a los demás. Paso seguido, elige 3 aspectos en los que tu producto puede mejorar o innovar.
  6. Ponte a trabajar en estos rasgos y no descuides los detalles más pequeños.
  7. En la actualidad es imprescindible brindar un buen trato a los clientes. Si tienes una fuerza de ventas, ten en cuenta que ellos deben estar bien capacitados y siempre atentos a las necesidades de tus compradores. Los agentes de ventas son el rostro de tu empresa y por lo tanto deben transmitir confianza, seguridad y respaldo.
  8. Recuerda que la relación con tus clientes no termina con la compra. El valor agregado muchas veces se encuentra al seguimiento que harás después de la venta. Pide sus datos de contacto y mantenlos informados o hazles conocer sobre nuevas promociones.
  9. Es importante que crees un canal con tus clientes. De esta manera siempre pueden contactar con tu empresa para resolver sus dudas, atender sus problemas o, quién sabe, para hacer negocios nuevamente. Aprovecha los canales digitales como páginas web y redes sociales.

Recuerda que el valor agregado muchas veces nace de ponerle atención a los detalles que otros no toman en cuenta. Piensa con calma y tómate todo el tiempo para perfeccionar tus productos y servicios. Si quieres darle protección extra a tu negocio, nosotros te asesoramos con planes de seguros que se ajustan a tus necesidades, sin importar el tamaño de tu emprendimiento.

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