Tecniseguros
La inseguridad en el transporte de personas y mercadería
15 noviembre, 2022

El primer semestre de 2022 estuvo marcado por una importante alza en los índices de delincuencia y violencia a lo largo del territorio nacional. Los robos vehiculares son parte de estas estadísticas sobre inseguridad en el transporte de personas y mercadería.

Según cifras de la empresa Carseg S.A. – Hunter en el año 2021 se llevaron a cabo 193 operativos de recuperación de vehículos y en este año entre los meses de enero y octubre van sumando alrededor de 260 operativos de recuperación vehicular.

De hecho, el último informe presentado por la Fiscalía General del Estado refleja que el robo de vehículos está sobre otros delitos como el robo a personas, a domicilios u otros bienes.

Existen dos modalidades o prácticas de robo que se dan en el Ecuador. La primera, más utilizada para vehículos de uso particular es la modalidad de vehículo estacionado, en donde el delincuente estudia previamente los movimientos del vehículo y del propietario. Al mínimo descuido consigue abrir el vehículo desde la utilización de herramientas hasta clonación de códigos de las alarmas.

Cuando hablamos más de transporte de carga y pasajeros, se dan con mayor frecuencia los asaltos y secuestros en donde las bandas usan armas de fuego para intimidar a los conductores, les someten y los llevan a lugares alejados con el fin de poder desmantelar el vehículo y/o llevarse la mercadería.

En cuanto a los tipos de vehículos robados, los números se presentan en la siguiente tabla según los datos de Hunter:

Respecto a las zonas de mayor incidencia de robos vehiculares reportados en el primer semestre del año en curso, la provincia del Guayas ocupa el primer lugar, con el 47% del total de robos, seguido de Los Ríos, con el 19,8%, Santo Domingo con el 7,75%, y Pichincha con el 6,89%.

Vías peligrosas para vehículos de uso particular

  1. Quito – Alóag – Santo Domingo – El Carmen – Flavio Alfaro – Chone – Calceta – Portoviejo – Manta y viceversa.
  2. Guayaquil – Nobol – Daule – Pedro Carbo – Jipijapa – Montecristi – Manta y viceversa.
  3. Quito – Cayambe – Otavalo – Atuntaqui – Ibarra – Bolívar – Huaca – Tulcán y viceversa.
  4. Vía Quito – Alóag – Machachi – Latacunga – Ambato – Riobamba y viceversa.
  5. Quito – Alóag – Machachi – Latacunga – Ambato –Riobamba – Alausí – Chunchi – Zhud – El Tambo – Cañar –Azogues – Cuenca y viceversa.
  6. Cuenca – Molleturo – Puerto Inca – Guayaquil y viceversa.
  7. Quito – Pifo – Papallacta – Baeza – Lumbaqui – Nueva Loja – Shushufindi y viceversa.

Para vehículos pesados o de carga

  1. Quito – Alóag – Santo Domingo – Quevedo – El Empalme – Balzar – Daule – Nobol – Guayaquil y viceversa.
  2. Vía Quito – Alóag – Santo Domingo – Quevedo – Ventanas – Babahoyo – Jujan – Yaguachi – Duran – Guayaquil y viceversa.
  3. Quito – Calacalí – San Miguel de los Bancos – Vicente Maldonado – Puerto Quito – La Independencia – Quinindé – Esmeraldas y viceversa.
  4. Guayaquil – Duran – El Triunfo – Cumandá – Pallatanga – Riobamba y viceversa.
  5. Quito – Alóag – Machachi – Latacunga – Ambato – Guaranda y viceversa.
  6. Guayaquil – Duran – La Troncal – Cochancay – Ducur – Suscal – Zhud – Tambo – Cañar – Azogues – Cuenca y viceversa.
  7. Pifo – La Virgen – Papallacta – Baeza – Lumbaqui – Cascales – Lago Agrio y viceversa.

Para reducir el riesgo de vulnerabilidad ante la delincuencia en las vías, existen medidas de seguridad que se pueden tomar:

  1. Plan de Ruta

El equipo de la empresa y el transportista pueden analizar qué rutas se presentan como las más peligrosas en el pasado más cercano, para evitarlas o para pasar por ellas -si no hay rutas alternativas- en momentos específicos del día en los que el peligro se pueda aminorar; es decir cuando haya mayor movimiento y luz.

El plan de ruta más seguro será el que incluya la planificación de paradas autorizadas (para descansar, comer, etc.), parada de combustible en puntos seguros y hasta posibles desvíos de ruta (porque puede haber cierre de vías y otro tipo de pormenores fuera de nuestro control).

  1. Uso de Tecnología

No todos los planes salen al pie de la letra. Quizás el conductor tenga una emergencia, o se encuentra más cansado de lo habitual. Tal vez, por un tema personal o una negligencia profesional, decide no seguir la ruta asignada. Hay enorme cantidad de variables; y cuando lo humano puede fallar, es momento de apoyarse en la tecnología y sus oportunidades.

  1. Comunicación

Cuando se trata de este tipo de viajes y cargas, las sumas económicas son bastante elevadas, por lo que es evidente que se conviertan en el principal blanco de mira para quienes se aprovechan del trabajo ajeno.

Ante esta realidad, el transportista solo debe tener contacto con personas autorizadas de la empresa, evitando dar detalles a extraños sobre lo que transporta o cuál es su destino final.

  1. Buenas Prácticas previas al viaje

El tanque de gasolina debe estar a tope al momento de partir el transportista. Esto para poder decidir de antemano las estaciones de servicio más seguras en las cuales detenerse.

La batería del celular del transportista debe estar al 100%, en caso de detectar una situación sospechosa, además de aplastar el botón de pánico, podrá hacer una llamada que tenga al tanto a la empresa de su paradero y del posible riesgo.

Ref: Tracklink, Hunter, El Comercio.

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